domingo, 22 de noviembre de 2009

Sobre el dinero, la ciencia y el LHC

Oigo últimamente bastante a la gente decir que el presupuesto gastado en el acelerador de hadrones (LHC) es una barbaridad, que los misterios del universo pueden esperar. Expondré una situación similar para que se pueda entender fácilmente.

Cuando Michael Faraday explicó su descubrimiento al primer ministro británico, Robert Peel, de que un imán en movimiento inducía corrientes eléctrivas en un conductor, él le preguntó:
-"¿Y esto para qué sirve?"
A lo que Faraday le respondió:
-"¿Para qué sirve un recién nacido?"

Un mundo sin este tipo de generadores eléctricos (producido por un movimiento mecánico que mueve unas palas o turbina y que hace que una bobina gire dentro de otra generando un campo magnético que induce corriente eléctrica debido al movimiento entre ellas), sería básicamente un mundo sin electricidad. ¿Nos hacemos a la idea de qué significa esto no? Sin luz en sitios oscuros, televisión, ordenadores, ascensores, aviones, satélites, teléfonos móviles, semáforos, coches y un casi infinito etc.









La ciencia es la mejor inversión de futuro, ni el LHC, ni la ciencia en general necesitan tijeras porque de ellos depende un futuro más cómodo y mejor.



1 comentario:

el ultimo superviviente en casa dijo...

estoy de acuerdo en casi todo salvo en dos cosas:
uno, la comparacion con lo del recien nacido me parece un poco demagogo, porque no podemos comparar un ser humano con la electricidad.
dos, al LHC SI DEBEN CORTARLE EL ROLLO QUE A LO TONTO SE CARGARAN LA TIERRA!! xD

un saludo desde casa!